Una alfombra persa única hecha a mano es una obra maestra singular, anudada a mano por artesanos expertos que utilizan técnicas transmitidas de generación en generación. A diferencia de las alfombras producidas en serie, no hay dos piezas idénticas; cada una presenta variaciones sutiles en el tejido y el diseño que reflejan el toque individual del tejedor. Estas alfombras no son solo decoración, sino auténticas obras de arte que capturan la herencia cultural y el alma artística de las regiones donde fueron creadas, como Tabriz y Kashan.
La calidad de una alfombra persa hecha a mano se define por su durabilidad excepcional y el uso de materiales naturales de primera calidad. Seleccionamos alfombras elaboradas con lana hilada a mano de alta calidad y seda fina, estrechamente anudadas sobre una base de algodón estable. Esta alta densidad de nudos garantiza que la alfombra se mantenga resistente bajo un uso intenso, mientras se vuelve más suave y hermosa con el tiempo. Una auténtica alfombra persa hecha a mano es una inversión construida para durar muchas décadas, convirtiéndose a menudo en una preciada reliquia familiar.
Mantenemos los más altos estándares de calidad a través de una rigurosa selección. Cada alfombra única es inspeccionada personalmente para verificar su integridad estructural, la precisión del tejido y la armonía del color antes de ser añadida a nuestra colección. Al elegir una pieza única de nuestra colección, tiene la garantía de un producto de alta gama que cumple con los criterios más estrictos del arte de las alfombras persas.